Ingredientes
Pétalos de rosa frescos, suficientes para llenar un recipiente de 1,5 litros
675g de azúcar
2-3 cucharadas de zumo de lima o limón
2 cucharadas generosas de agua de rosas
Tarros de conservas esterilizados
Método
Corta y descarta la base blanca de los pétalos. Coloca los pétalos en un cuenco grande, cúbrelos con agua fría y mételos en el frigorífico durante una hora. Escurre el agua y reparte los pétalos para que se sequen en papel absorbente. Enjuaga y seca el cuenco y, luego, empieza a colocar los pétalos en capas con 225g de azúcar, asegurándote de que todos tengan azúcar encima. Cúbrelos con film de plástico y mételos en el frigorífico durante la noche o un mínimo de 8 horas.
En una cazuela, pon a hervir el azúcar restante y 250ml de agua. Añade el zumo de lima o limón y luego la mezcla de pétalos y azúcar. Haz que vuelva a hervir y luego baja el fuego a la mitad durante 15-20 minutos (a 110°C/220°F en un termómetro de azúcar o haz la prueba del plato – mientras la mermelada se esté cociendo, coloca un plato pequeño en el congelador).
Al cabo de 20-30 minutos más o menos, echa una cantidad pequeña de mermelada en el plato, vuelve a meterla en el congelador durante 30 segundos y luego presiónala con el dedo. Si se pega y se arruga, entonces está lista. Añade el agua de rosas y vuelve a llevarla a 110°C/220°F, lo cual tardará muy poco tiempo. Debes añadir el agua de rosas al final para que no pierda su fragancia. Echa la mermelada en los tarros esterilizados.